En los últimos años, la custodia compartida ha ganado relevancia como una solución preferente en procesos de separación o divorcio, ya que busca el equilibrio en la crianza y asegura el derecho de los hijos a mantener una relación constante con ambos padres. Sin embargo, no siempre se concede, y las decisiones judiciales se basan en criterios muy específicos que buscan el bienestar del menor. Si te encuentras en esta situación o quieres conocer más sobre tus derechos y opciones, nuestros abogados en Jerez están aquí para brindarte asesoramiento experto.
¿Qué es la custodia compartida?
La custodia compartida es un régimen legal que se implementa tras una separación o divorcio y tiene como objetivo que ambos progenitores participen activamente en la vida diaria de sus hijos. Esto significa que las responsabilidades, como el cuidado, la educación y el bienestar del menor, son compartidas de manera equitativa. A diferencia de la custodia exclusiva, la custodia compartida permite que los niños puedan crecer sintiéndose igual de apoyados y queridos por ambos padres.
Este modelo de custodia está basado en la idea de que el niño o niña necesita una relación sólida con ambos padres, lo cual contribuye a su desarrollo emocional y social. No obstante, para que la custodia compartida sea efectiva, es fundamental que los progenitores tengan una comunicación fluida y capacidad de colaborar en la toma de decisiones importantes sobre la vida de sus hijos.
Tipos de custodia compartida
Existen diferentes modalidades de custodia compartida que pueden adaptarse a las necesidades de cada familia:
- Custodia alterna: Los padres se turnan para convivir con los hijos, por ejemplo, cada semana o cada mes.
- Custodia simultánea: En casos muy específicos, ambos progenitores conviven en la misma vivienda con los hijos, aunque esto es poco habitual.
- Custodia repartida: Los padres dividen el tiempo por periodos más largos, como por ejemplo, cada seis meses.
Requisitos de la custodia compartida
Para conceder la custodia compartida, el juez evalúa ciertos criterios clave. Estos incluyen:
- La relación entre los progenitores y su capacidad para comunicarse y tomar decisiones conjuntamente.
- La disponibilidad de ambos para hacerse cargo de los menores.
- La estabilidad del entorno en el que los hijos van a vivir.
- La opinión del menor, si tiene suficiente madurez.
En caso de que necesites más información o ayuda específica, no dudes en consultar a un Abogado de familia en Jerez.
En qué casos se deniega la custodia compartida
Aunque la custodia compartida se considera beneficiosa en muchos contextos, hay circunstancias específicas en las que el juez puede denegarla. Estas situaciones suelen implicar riesgos para el bienestar físico o emocional del menor. A continuación, se detallan algunas de estas circunstancias:
- Violencia de género: Si uno de los padres ha sido condenado por delitos de violencia doméstica o existe un historial probado de abusos, el juez podría denegar la custodia compartida para proteger al menor.
- Desinterés o abandono: Si un progenitor ha mostrado una actitud de desinterés o negligencia hacia el cuidado del menor, por ejemplo, ausentándose frecuentemente de sus responsabilidades, el juez también podría denegar la custodia compartida.
- Problemas de salud mental o adicciones: Si se demuestra que uno de los progenitores tiene problemas graves de salud mental, adicciones a sustancias, o cualquier otra condición que pueda poner en peligro el bienestar del menor, el juez decidirá en favor de la custodia exclusiva.
- Conflictos irreconciliables entre los padres: Cuando el nivel de tensión y conflicto entre los progenitores es muy alto, y se considera que podría afectar el entorno emocional del niño, se opta por no conceder la custodia compartida.
- Entorno inadecuado: Si uno de los progenitores vive en un entorno que no es seguro o no cuenta con las condiciones mínimas para el desarrollo del menor, también se podría denegar.
Ejemplos de custodia compartida
- Marta y José, padres de dos niños, deciden optar por la custodia compartida. Tras discutirlo, acuerdan que Marta tendrá a los niños durante una semana y José los cuidará la siguiente. Ambos se comprometen a comunicarse de manera efectiva y a coordinar actividades escolares y citas médicas.
- Ana y Luis acuerdan dividir los fines de semana y rotar las vacaciones escolares. A pesar de que no siempre se entienden a la perfección, logran establecer un sistema que garantiza el bienestar de sus hijos, poniendo a los menores en primer lugar.
- Laura y David, que viven en la misma ciudad, deciden que lo mejor es dividir los días de la semana. Los lunes, miércoles y viernes los niños están con Laura, mientras que los martes, jueves y sábados están con David. El domingo se rota cada semana.
- Pedro y Carla optan por la custodia compartida con base en las actividades extracurriculares de su hijo. Pedro, que tiene un horario más flexible, se encarga de las tardes en que hay deportes, mientras que Carla se ocupa los días que su hijo asiste a actividades académicas.
¿Con la custodia compartida hay que pagar manutención?
La cuestión de la manutención en un régimen de custodia compartida depende de múltiples factores, principalmente del equilibrio económico entre los padres. Cuando los ingresos de ambos progenitores son similares y los gastos del menor se comparten equitativamente, es posible que no sea necesario pagar una pensión de alimentos. Sin embargo, si existe una diferencia notable en los ingresos, el progenitor con mayor capacidad económica podría tener que contribuir con una cantidad mensual para garantizar que los menores disfruten del mismo nivel de vida con ambos padres.
Por ejemplo, si uno de los padres tiene un salario considerablemente mayor, podría establecerse una pensión alimenticia para compensar las diferencias económicas y asegurar que el menor no sufra privaciones con ninguno de los dos. Es importante recordar que las necesidades de los hijos, como la educación, la salud y la alimentación, son prioritarias y el juez buscará siempre el bienestar del menor. Si tienes dudas específicas sobre tu situación, contacta aquí para recibir orientación legal personalizada.
Preguntas frecuentes
¿Puede un progenitor pedir custodia compartida si trabaja a tiempo completo?
Sí, aunque el juez evaluará si su horario laboral le permite atender las necesidades del menor sin perjudicar su bienestar diario.
¿Es posible tener custodia compartida si los padres viven en diferentes ciudades?
Es complicado, pero no imposible. El juez analizará la viabilidad y si el traslado constante afectaría la estabilidad emocional y académica del menor.
¿Puedo modificar la custodia compartida si cambian las circunstancias?
Sí, se puede solicitar una modificación judicial si las condiciones actuales no son favorables para el menor o si hay un cambio significativo en la situación.
¿Afecta la custodia compartida a las decisiones educativas del menor?
No, ambos padres mantienen la patria potestad y deben ponerse de acuerdo sobre aspectos importantes, como la educación y la salud.